El hueso, a pesar de ser un tejido duro, puede llegar a romperse, lo que da lugar a las fracturas óseas. Dependiendo de la gravedad de estas, puede requerir una cirugía. En este post te contamos todo lo que debes conocer sobre las fracturas óseas, tu tipología, síntomas, causas y el tratamiento más eficaz.
¿Qué son las fracturas óseas?
Una fractura ósea es una ruptura total o parcial de un hueso. Son lesiones en las que el hueso pierde la continuidad de su tejido, de manera que su forma se encuentra alterada por una una fuerza que supera la resistencia del tejido óseo.
Esto ocurre normalmente en el marco de los accidentes automovilísticos o traumatismos como caídas.
Tipos de roturas de los huesos
El hueso puede fracturarse de diversas formas, por lo que se deben conocer los tipos de clasificación de las fracturas óseas que existen.
Generalmente, se clasifican en fracturas cerradas o abiertas, en función de si el hueso ha salido por fuera de la piel o no.
En función de la cantidad de fragmentos que componen las fracturas óseas, estas se pueden clasificar en diferentes tipologías.
Las fracturas transversas son lesiones cuyo trayecto es perpendicular al eje mayor del hueso, generalmente ocasionadas por un golpe directo en el hueso.
En segundo lugar, se conoce como fractura lineal a aquella que va en el mismo sentido del eje mayor del hueso, sin mover parte de tejido óseo.
Por su parte, la fractura oblicua sin desplazamiento es una rotura ósea inclinada, y aparece como causa de traumatismos directos o indirectos, mediante mecanismos de flexión del hueso. En esta fractura, los extremos fracturados se encuentran separados.
En la fractura oblicua con desplazamiento existe una separación de los extremos de la fractura, y suelen ser fracturas inestables.
Las fracturas en espiral, también denominadas fracturas espiroideas son lesiones poco frecuentes. Se parecen a las fracturas oblicuas y presentan un elemento de rotación que discurre de manera longitudinal en el hueso.
Las fracturas en tallo verde son frecuentes en niños, donde, además del desarrollo óseo, los huesos se astillan.
Otra de las fracturas óseas que se puede encontrar es la fractura conminuta, una de las lesiones más graves, pues el hueso se quiebra y aparecen muchos fragmentos.
Finalmente, las fracturas por estrés son poco conocidas, y aparecen por movimientos repetitivos que van debilitando la estructura de los huesos del cuerpo humano. Se trata de una fractura muy común en deportistas de carrera y salto.
Síntomas de las fracturas óseas
La sintomatología de los fracturas óseas es muy variada, pues depende del hueso fracturado y el la fragmentación del mismo. Algunos de los síntomas comunes de las fracturas óseas pueden ser dolores puntuales a la hora de realizar un movimiento de una determinada zona del cuerpo, con crujidos durante el movimiento.
Por otro lado, el paciente con una fractura ósea puede presentar hematomas óseos, bastante comunes en este tipo de lesiones.
También puede aparecer un entumecimiento y hormigueo de los huesos.
Causas de las roturas de huesos
Las cusas de la aparición de las fracturas óseas puede ser muy variada. Como bien se ha indicado con anterioridad, algunas de las fracturas óseas aparecen debido a lesiones deportivas, originadas por fuerzas que actúan sobre el hueso con frecuencia. Estas son las fracturas óseas por estrés.
Las fracturas también pueden aparecer por la presencia de un hueso debilitado por una patología o enfermedad, como pueden ser los tumores y quistes óseos, osteoporosis y metástasis.
Prevención y tratamiento de las fracturas óseas
Es importante saber que cualquier tipo de fractura ósea implicará realizar la menor cantidad de movimiento posible, pues si se agrava, podría provocar más dolores e incluso complicaciones. Por ello, los especialistas deberán realizar una radiografía con el objetivo de identificar la posición del hueso que se encuentra fracturado.
Mantener los huesos fuertes ayudará a evitar la aparición de las fracturas óseas. En este sentido, es imprescindible tomar alimentos ricos en calcio y vitamina D para el desarrollo y fortalecimiento de los huesos.
El ejercicio continuado es otro de los puntos a tomar en consideración, con especial cuidado de aquellos que implica la realización de movimientos repetitivos de los huesos.
La fisioterapia también contribuirá a un fortalecimiento de los huesos. Rekovery Clinic es una clínica de fisioterapia y rehabilitación en Madrid con un equipo de expertos que pueden ayudarte en el proceso de regeneración ósea.
Si detectas alguno de los síntomas expuestos durante el post, es necesario que acudas a un especialista en traumatología para obtener un diagnóstico más preciso y que pueda determinar el tratamiento más acertado. En Elgeadi Traumatología contamos con profesionales a la vanguardia de la tecnología en los tratamientos más avanzados, con más de 10 años de experiencia en el sector de la medicina. Contacta con nuestros expertos y comienza la calidad de vida que tus huesos merecen.