Una de las lesiones más comunes de la mano es la del hueso metacarpiano. En muchos casos, es suficiente con inmovilizar la articulación del paciente. Sin embargo, en otras ocasiones, es necesario que el paciente se someta a una intervención quirúrgica.
¿Cuáles son los huesos metacarpianos de la mano?
La mano está formada por varios grupos de huesos: falanges distales, falanges medias, falanges proximales, metacarpianos o metacarpos y carpianos o carpos.
Existen cinco huesos metacarpianos, uno por cada dedo, dicho hueso es el que une las falanges proximales con los carpianos. Este hueso tiene tres partes: cabeza, diáfisis y base.
Tipos de fractura del metacarpiano
Las fracturas del metacarpiano, se clasifican en función de la parte del hueso dónde se localizan. Si se ha producido en la parte del nudillo recibe el nombre de fractura de cabeza y si se localiza por debajo del nudillo, fractura subcapital. Estos dos tipos son las más complejas.
Una fractura en la base del dedo sería una fractura de base. La fractura localizada en el centro del hueso metacarpiano, denomina fractura diafisaria.
Fractura del 5º metacarpiano
Esta fractura se produce en el dedo meñique de la mano, es la más común de todas ya que es la que se suele producir debido a traumatismos. Popularmente es conocida como la fractura del boxeador.
¿Qué fracturas del metacarpiano suelen necesitar cirugía?
Normalmente las fracturas del metacarpiano que precisan una cirugía de mano suelen ser:
- Malrotadas
- Intraarticulares
- Abiertas
- Espiroideas
- Conminutas
- Subcapitales
- Fracturas irreductibles
- Oblicuas